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Combustible para mi viaje: ¿préstamo o tarjeta de crédito?

Se acercan las fiestas de medio año y ese viaje que tanto estabas esperando aparece a la vuelta de la esquina. Quizá ya tienes los boletos y los pagarás cuando recibas la gratificación, pero aún no decides cómo solventar los gastos de estadía, alimentos, viajes internos y, tal vez, un hermoso regalo para alguien especial en el destino.

Las instituciones financieras te ofrecen algunas soluciones para resolver esa duda. Sin embargo, es importante que conozcas cómo sacarles el mejor provecho. Veamos ahora si es mejor usar tu tarjeta de crédito o solicitar un préstamo efectivo para tus gastos.

Dos soluciones, un destino

Un crédito o un préstamo te permitirán disponer de un monto de dinero que no tienes en este momento; por lo tanto, lo tendrás que devolver. Con este principio podrás calcular con más seguridad cuánto dinero necesitas y también decidirás en cuánto tiempo lo podrás pagar.

La siguiente pregunta que debes hacerte es: ¿cuáles serán mis gastos fijos? El hospedaje es uno de estos, al igual que un monto para alimentos, otro monto para movilidad y otro para emergencias. Si vas con tu familia, fuera del hospedaje multiplica el subtotal de los otros gastos por el número de personas. No debe faltarte esta cifra.

Lo que tienes a mano

Ahora bien, cada producto financiero tiene sus beneficios y sus precauciones. La tarjeta de crédito, por ejemplo, te permite gastar de inmediato si hay un inconveniente o, tal vez, si viste algo que te interesa y que podrías pagar en cuotas. Además al usar tu tarjeta de crédito acumulas millas o recibes otras facilidades (descuentos, vales, etc.), según la modalidad del producto.

El préstamo efectivo, por otra parte, tiene la ventaja de tener una tasa de interés menor que la tarjeta y se puede pagar en varias cuotas, según el banco que elijas. Recuerda que no necesariamente dispones de este producto de inmediato: debes solicitarlo y dependiendo de tu perfil y de los procesos del banco, demorará entre uno o dos días en hacerse efectivo.

¿Y cómo los uso?

Si has realizado el ejercicio de calcular el mínimo de dinero que necesitas para tu estadía o la de tu familia, te conviene el préstamo efectivo. Pagarás el monto más alto de todo tu viaje con un producto más barato e, inclusive, tendrás más tiempo para devolverlo y sin cargar intereses, al ser de tasa fija. Guarda siempre una cantidad en efectivo para imprevistos durante el viaje.

Algunas instituciones te ofrecen facilidades en préstamo efectivo como periodo de gracia, mejor tasa si tienes otros productos en el mismo banco, prepago, canales digitales para cancelar las cuotas, etc.

En el caso de la tarjeta de crédito, te conviene usarla para gastos menores o aquellos que se presenten en el momento. Tendrás la línea siempre disponible y será muy fácil de usar. No olvides activar tu tarjeta en el país de destino, con una llamada o mensaje previo a tu entidad financiera.

Si usas tu tarjeta de crédito para aquellos gastos imprevistos (incluso, si así lo decides, para todo tu viaje), recuerda siempre que te conviene pagar la línea utilizada en el menor número posible de cuotas. De esta manera, pagarás menos intereses.